La Semana Europea de la Movilidad 2021 (SEM 2021) arranca la edición de este año poniendo en el centro la salud de la ciudadanía. Y es que son los mismos entornos urbanos los que representan más del 70% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero (ONU). Un porcentaje demasiado alto que evidencia la necesidad de replantear el uso del transporte urbano e ir más allá de los beneficios ambientales, apostando por soluciones innovadoras que marcarán las próximas tendencias en movilidad sostenible. Los expertos de BeGas tienen claro que las próximas innovaciones en el transporte urbano tendrán en cuenta, además de la reducción de emisiones contaminantes, factores como la salud pública, la seguridad, la economía circular y el ahorro para instituciones y empresas, como aspectos clave para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.
Con su participación en la Semana Europea de la Movilidad 2021, BeGas reafirma su compromiso con el transporte urbano sostenible. Todo ello, para concienciar tanto a la ciudadanía como a instituciones y empresas privadas, de la relevancia de apostar de manera definitiva por aquellas soluciones que mejoren la calidad de vida en las ciudades desde una perspectiva ambiental, económica y social.
Siguiendo este enfoque, con el que pretende aportar soluciones ecológicas únicas en el mercado del transporte y guiar a instituciones y empresas para ser más eficientes en la construcción de ciudades sostenibles, establece las siguientes tendencias que triunfarán en la movilidad urbana sostenible:
La sostenibilidad, presente en todos los puntos de la cadena de producción
Para que la transición hacia el transporte urbano sostenible sea definitiva, la economía circular debe estar presente en cada una de las decisiones que se tomen en este ámbito. Gracias a este cambio de enfoque, han nacido servicios innovadores como los de BeGas, que fomentan la reutilización de flotas de camiones y autobuses urbanos, y su remotorización, para convertirlos en vehículos ecológicos. Esta opción, que sustituye motores diésel altamente contaminantes por motores 100% autogás o biopropano, permite acompañar a camiones y autobuses urbanos en sus últimos años de vida útil, fomentando así el aprovechamiento del vehículo y evitando la generación de más de 80.000 kg de residuos en una flota de cinco vehículos. El uso del biopropano, es clave para cerrar el círculo, ya que su composición 100% renovable permite que el vehículo remotorizado sea completamente respetuoso con los principios de la movilidad sostenible.
Soluciones innovadoras para el transporte de última milla
Esta nueva variedad de transporte que pone el foco en el último trayecto que recorre un paquete hasta ser entregado a su destinatario, es una de las tendencias más potentes en movilidad sostenible. Teniendo en cuenta que, el comercio online ha crecido más del 11% en julio 2021, lejos del 42% que registró durante el segundo trimestre de 2020, la innovación en este punto es esencial para que los paquetes se entreguen realizando trayectos más sostenibles. En BeGas, son conscientes de ello y, por eso, ya están trabajando, junto a un consorcio de empresas y centros tecnológicos, en el desarrollo de un motor ecológico que cubrirá este mercado.
Energías limpias en el transporte urbano como protagonistas para mejorar la calidad del aire
La calidad del aire en los centros urbanos se ha vuelto una de las prioridades en los planes de movilidad sostenible de los ayuntamientos por las graves consecuencias que pueden tener en la salud de las personas. El tráfico es, de hecho, la principal causa de contaminación en las ciudades, según Ecologistas en Acción. Por ello, el uso de combustibles limpios como el autogás o el biopropano, son alternativas que pueden conseguir grandes resultados ambientales. Y es que los vehículos propulsados por autogás reducen hasta un 90% las emisiones contaminantes, como los NOx o las partículas en suspensión. Pero eso no es todo, el precio de este combustible es entre un 40% y un 50% inferior al de los combustibles convencionales.
Consolidación de la movilidad compartida, también llamada ‘micromovilidad compartida’
Un término que va a seguir arrasando en los centros urbanos. Conceptos como el car sharing y el alquiler de motos, bicicletas y patinetes por minuto de uso han replanteado la manera de desplazarnos en las ciudades, abriendo una nueva vía en el transporte urbano sostenible. Tampoco se quedan atrás vehículos públicos tradicionales como el autobús, un medio de transporte seguro y saludable que ya se está sumando al uso de combustibles ecológicos. Todos estos vehículos serán claves en los próximos meses, pues cada vez son más ciudades las que limitan el acceso a los centros urbanos con el vehículo particular. Un claro ejemplo es la normativa Distrito Centro aprobada en la capital. Con ella, a partir del 1 de enero de 2023, quedará prohibido el acceso y la circulación a los vehículos sin distintivo ambiental por las vías públicas urbanas del interior y en la propia M-30.
El compromiso de la industria con la movilidad del futuro
A través de la inversión en desarrollo tecnológico, son muchos los proyectos que han conseguido cubrir las cambiantes necesidades de las ciudades. En el caso de BeGas, este desarrollo se materializa en la inclusión del biopropano, una energía generada a partir de residuos y desechos en más de un 60% (el resto son aceites vegetales de origen sostenible), como propulsor de sus motores AVG. Estos motores tienen la última homologación europea Euro VI-D y obtienen la etiqueta Eco-DGT. De esta manera, el impacto ambiental de los vehículos pesados en la ciudad tendrá una huella neutra en carbono.
Colaboración público-privada con el objetivo de construir planes de movilidad más transversales
La línea de unión entre lo público y lo privado cada vez es más fina. Y es que algunas administraciones han dejado atrás los planes de infraestructuras y han comenzado a hacer planes de transporte y movilidad más globales y transversales. En Francia, por ejemplo, ya cuentan con una Ley de Orientación de la Movilidad, la primera norma jurídica de un estado europeo que regula la movilidad en su conjunto. En el caso de España, iniciativas como la Estrategia de Movilidad 2030, el Marco Estratégico de Energía, o la Estrategia de Descarbonización a 2050 que prepara el Gobierno, ya han dejado entrever que seguirán la misma dirección. Empresas como BeGas, también apoyan este enfoque sostenible posicionándose al lado de instituciones de todos los tamaños ayudándoles en el camino hacia la descarbonización del transporte.