La contaminación del aire, producida en gran parte por el transporte, representa un importante riesgo medioambiental para la salud. Tanto es así que 4,2 millones de muertes prematuras están relacionadas con este fenómeno, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Sin embargo, la salud no es el único aspecto que se ve afectado por esta causa; también la economía. Y es que la contaminación cuesta a cada ciudadano español una media de 1.000 euros al año, tal y como refleja el último informe de la European Public Health Alliance (EPHA). Estos datos ponen de manifiesto la necesidad de apostar por alternativas de transporte sostenible que contribuyan a incrementar la calidad de vida en las ciudades.
La irrupción de la pandemia está acelerando la transformación del transporte urbano hacia tecnologías limpias con la misión de mejorar la calidad de vida en los centros urbanos y, precisamente, BeGas es una de las empresas que quiere acompañar a instituciones y ayuntamientos en este proceso.
Esta empresa de base tecnológica y carácter investigador se ha convertido en el único productor del mundo de motores alimentados al 100% por AutoGas (gas licuado) con homologación europea Euro VI D, que reduce drásticamente las emisiones contaminantes del transporte por carretera.
Precisamente el gas licuado es el combustible alternativo más usado en el mundo, ofreciendo las mismas prestaciones que los carburantes tradicionales y, además, contribuye de forma efectiva a la mejora de la calidad del aire de las ciudades. La reducción de emisiones de partículas y óxidos de nitrógeno que logra, lo convierten en un combustible ecológico y limpio, lo que proporciona al sector del transporte la solución perfecta para las flotas de autobuses y camiones.
“En BeGas apostamos por el AutoGas porque es un combustible ecológico que, además, tiene un precio, aproximadamente, un 45% más económico que el litro de diésel, lo que permite reducir un 36% los gastos de explotación”, apunta Pedro Silva, CEO de la compañía.
Las ventajas del motor de AutoGas
El motor de gas BeGas AVG cuenta con la homologación Euro VI Step D, la más avanzada de la UE para equipos de combustión. De hecho, reduce los estándares de emisión que exige la normativa en un 51% los niveles de CO, un 22% los de niveles de PN, un 57% los niveles de Nox, un 29% los de PM10 y 87% en los niveles de HC.
Estas cifras, permiten que todos los motores fabricados por BeGas obtengan el distintivo ambiental ECO de la DGT, ofreciendo una solución única al mercado que combina la innovación tecnológica de control de emisiones con el uso de un combustible limpio.
“La apuesta innovadora de BeGas ha propiciado que grandes empresas energéticas comprometidas con la sostenibilidad, así como importantes fondos públicos y privados, hayan apostado por este tipo de motores, lo que hace que evolucionemos hacia una sociedad menos contaminada”, señala Silva.
Otro de los beneficios en su buena adaptación en vehículos industriales pesados es su tamaño. Los BeGas AVG son motores más compactos que los convencionales, lo que, sumado a la propulsión por este combustible alternativo en fase líquida, aumenta las prestaciones del motor.
Además, el sistema de inyección líquida LGI proporciona un control absoluto del combustible desde el depósito a la punta del inyector, obteniendo un bajo consumo de combustible y una perfecta mezcla de oxígeno/gas dentro del cilindro. Al inyectarse el gas en fase líquida, se reduce la temperatura en la cámara de combustión y contribuye a la reducción de las emisiones de los gases contaminantes. De hecho, las emisiones de CO2 de estos motores se encuentran un 15% por debajo de los motores diésel equivalentes más avanzados.